Hoy nos hemos despedido del campamento hasta el mes de Septiembre y no lo hemos podido hacer de mejor forma que con un completo día de piscina.
Al llegar al cole ya notábamos que había algo diferente: podías elegir lo que prefirieras para desayunar, el comedor estaba vacío de materiales de talleres y podías jugar con balones y colchonetas o bailar Batuka hasta que vinieran todos.
Los padres han estado más tiempo en la puerta. Agradeciéndonos el empeño y dedicación que les hemos demostrado, las horas de esfuerzo, comentando anécdotas de sus hijos y destacando las actividades que más les han gustado.
Hemos estado ensayando la chirigota que íbamos a cantar a los otros colegios y le hemos añadido más instrumentos, confiando en que les gustara. Y nos hemos vuelto a poner nuestro “uniforme” naranja.
El camino a la piscina ha pasado casi volando: queríamos disfrutar al máximo de este recorrido junto a nuestros compañeros. Allí nos hemos tomado el tentempié de un bocado deseando pegarnos el primer chapuzón. Los monitores nos han recompensado permitiéndonos estar más tiempo en el agua e incluso ¡bañarnos en la olímpica a los nadadores más capaces! Entre baño y baño jugamos a las cartas (ya somos unos expertos jugando al uno), cantamos canciones y disfrutamos de los juegos que nos proponían los monitores.
Tras la comida volvimos donde teníamos las toallas a prepararnos para nuestra gran chirigota. Nos pusimos nuestros disfraces, agarramos los instrumentos y nos dispusimos a agradar a nuestro público: niños y monitores de otros campamentos e incluso bañistas y personal de la piscina.
Al concluir la actuación de los niños les ha tocado el turno a los monitores y coordinadores que han sorprendido a todos con una Batukada en toda regla y han repartido caramelos y golosinas entre todos!!!
Después Alejandro nos ha dedicado unas palabras ensalzando los valores que nos identifican: compromiso, dedicación, entrega, compañerismo, ilusión, educación… Y agradeciendo el trabajo de todos.
Llegó el momento de la despedida (algunos con alguna lagrimilla en los ojos) y nos hemos dirigido a la puerta donde nos esperaban los padres. Allí hemos recibido más muestras de afecto y agradecimientos mutuos y nos hemos deseado un ¡¡FELIZ VERANO!! y un ¡¡HASTA PRONTO!! Porque recordad que esto en Septiembre continúa…
P.D.: Quiero agradecer personalmente las 5 maravillosas semanas que hemos pasado juntos a todos los implicados en este proyecto. A Flor y Alejandro, mucho más que mis jefes; a mis monitores que me han respondido perfectamente (¡y soportado!); a las coordis (Elena y Sara) que han ayudado a sacar esto adelante y de las que no dejo de aprender; a los monitores de los otros campas, verdaderos cracks; a los colaboradores en la sombra (Ale y Belinda) y sobre todo a los niños y padres sin los cuales esto no sería posible!!!
¡¡MUCHAS GRACIAS A TODOS!!
Paris (Coordinador)
Yo pertenezco a la generación de niñ@s que se tiraban los tres meses de verano literalmente a la bartola, en el pueblo, la playa, jugando en la calle con la pandilla, con las bicis….
Ahora es diferente. Tienes que hacer un sudoku para cuadrar el calendario de vacaciones de tus hijos a las tuyas. Y aún tirando, de hasta el último contacto familiar posible, te faltan dedos !
Cuando ya tiras la toalla y empiezas a pensar que no eres peor madre/padre por dejar a tu hij@ en el campamento urbano (esto sobre todo nos pasa a los que somos primerizos), decides apuntarle a uno !!
¿Y qué decir después de la experiencia?
Ante todo GRACIAS.
Os los curráis de lo lindo y eso se agradece, se ve que los niños disfrutan… y lo notan.
Le ponéis ganas e ilusión, y eso no se paga con dinero.
Muchas gracias a tod@s y ánimo para los siguientes!
Buen verano!!!! 😉