Llegó el 1 de Agosto y, con él, el ‘cierre temporal’ del campamento Tagore. Ha sido más de un mes repleto de grandes momentos y emociones.
Sinceramente, no creo que ninguno de los que hemos participado en este campamento pudiésemos quedarnos con sólo uno de ellos: los días de piscina, las grandes gymkhanas superando pruebas para encontrar a nuestros amigos, los talleres, las representaciones de los monitores, las excursiones…
Aunque siempre guardamos un especial recuerdo de nuestros tradicionales “San Tagore”, el taller de cocina o la gran Noche de estrellas. Todos ellos ambientados, como cada semana, en el mundo de la fantasía y las películas animadas que nos han permitido volver a nuestra infancia a muchos de nosotros.
Recordando todos estos momentos necesito agradecer su trabajo y empeño a todo mi equipo de monitores que a diario se esforzaban en que cada niño se lo pasara bien y disfrutara aprendiendo… Esa forma de hacer cada día algo especial que contribuyera a su crecimiento y desarrollo.
Por supuesto, debo dar las gracias a todas esas mamás y papás que han confiado en mí, en mi equipo y en Facei para dejar a sus hijos con nosotros y permitirles que vivan grandes aventuras.
También quiero agradecer a “ La cúpula” su apoyo y confianza en mí. El siempre tener una palabra de aliento, un abrazo cuando es necesario y sus sabios consejos.
Y, por último,no puedo dejar de agradecer a mis niños sus sonrisas, sus abrazos, su ilusión, su energía, su inocencia.El recordarme día tras día por qué me dedico a esto. El hacerme olvidar con una sonrisa las horas de trabajo, el cansancio…
Pero, como he dicho, solo se trata de un ‘cierre temporal’. Volvemos en Septiembre y, como ya sabéis, paso lista… 😉